La idea es la de que las calorías del alcohol no
afecten a la perfecta silueta de la mujer, por lo que una respuesta automática
es la bulimia o la anorexia. Podemos decir que se trata de un estado
psicológico, un vacío interior que se llena con el alcohol.
Esta sustancia es muy recurrente cuando se tienen problemas psicológicos, y
cuando se es bulímico o se tiene anorexia, una salida puede ser la bebida.
Ahora bien, todo
nace con un trastorno alimenticio, es decir, de la anorexia o la bulimia.
Cuando una persona enferma, empieza a sustituir la comida por líquido, por lo
que bebe mucha agua. Según se va
incrementando esa sensación y los problemas acuden como losas pesadas a la
mente de la persona anoréxica, el alcohol puede ser una salida, aunque
realmente no lo es, claro .